Hoy me he puesto a contar las páginas que le quedan a mi libreta, no son muchas, pero tampoco menos de veinte. De seguro lo hice para perder el tiempo.
Hacía tiempo que no hacía algo que denotara aburrimiento. Creo que estoy empezando a aburrirme y ese es mi peor defecto. Los demás verán que estoy muy contenta, que soy muy productiva mientras me miran, pero al primer segundo, ya me empiezo a aburrir.
Desde ya me pongo a pensar en nuevos rumbos, retomar los que dejé, planear el futuro que quizás no lleve a cabo. El presente me aburre, lo hace siempre, no lo puedo evitar.
Cada vez me cuesta más salir por las mañanas, salgo cuando ya es de tarde.
No soporto el aburrimiento.