Me escaparé un momento, me escapo porque siento venir lo más terrible en mí. El frío recorre mis venas y cada uno de mis músculos impiden concentrarme. El cielo se encapota sobre mí, las nubes entran al yo respirarlas, viene este sentimiento y sensación que me hace ceder, perder el control, perder todo lo que sentí conseguir. Mi mente se fuerza un poco, la voluntad no es suficiente, no logra arrancar esto que es ya acostumbrado. Pierdo el equilibrio, un pequeño daño hace en mí estragos, un gran dolor no logra hacerme tambalear. Intento ensordecer los ruidos en mi mente, ensordecer el silencio del ruido al rebotar. Silenciar mensajes y palabras que no sospechan el sutil tumulto en mí. Cierro ventanas para no oír el constante teclear del tiempo perdido, cierro ventanas y quedo yo afuera. Los pájaros me acompañarán.